KMT 614 Ruedas abrasivas de tela esmeril con vástago para Metal universal
Agente aglomerante | Resina sintética |
Tipo de grano | Óxido de aluminio |
Metal universal | |
Madera |
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Plástico |
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KMT 614 – cepillo abrasivo con vástago para metal
La herramienta óptima para el mecanizado de metal
Este cepillo abrasivo con vástago está diseñado para equipos portátiles. Es aplicable para uso radial y frontal. La rueda abrasiva es apropiada para el mecanizado de
- metal,
- madera y
- plástico.
¿Qué ventajas ofrece un cepillo abrasivo con vástago?
Las láminas abrasivas de la rueda abrasiva están dispuestas en forma de copa. Su abanico de láminas flexible garantiza la adaptación óptima a los contornos de la pieza. El grano abrasivo está hecho de óxido de aluminio y está fijado en las láminas mediante resina sintética. Gracias a la adaptación de las láminas ala estructura superficial de la pieza se obtiene una imagen de lijado suave. Durante el lijado, solo los bordes de las láminas abrasivas entran en contacto con la superficie de la pieza. Por este motivo, solo se desgastan las láminas superiores y así se dispone de grano abrasivo fresco siempre. Esto permite conseguir una imagen de lijado constante a lo largo de toda la vida útil del cepillo abrasivo con vástago.
Lo que hay que tener en cuenta al utilizar un cepillo abrasivo con vástago
Para el mecanizado óptimo de metal y otros materiales con el modelo KMT 614 es importante utilizar la amoladora recta, el taladro o el eje flexible de giro correcta. Por motivos de seguridad se debe prestar atención a que no se superen las revoluciones permitidas en función de la longitud libre del vástago (20 - 25 m/s). Una velocidad de giro demasiado baja produce una imagen de lijado deficiente. Si la velocidad de giro es demasiado baja, las láminas abrasivas son aplicadas en la pieza por la presión de aplicación. De esta manera se lija una superficie más grande, con la consecuencia de un aumento de la fricción entre el cepillo abrasivo con vástago y la pieza. Con la fricción se genera calor, tanto en la pieza como en la rueda abrasiva. Por una parte, este altera la imagen de lijado y por otra parte reduce la vida útil de las láminas abrasivas. Además, para la aplicación segura se debe mantener la longitud de sujeción mínima de 20 mm.
Lo que hay que tener en cuenta al pasar de la banda abrasiva a la rueda abrasiva
Con la misma granulometría, el cepillo abrasivo con vástago produce una imagen de lijado considerablemente más fina que una banda abrasiva. Después del mecanizado con la rueda abrasiva, la estructura de superficie del metal muestra unas líneas continuas más largas que con una banda. Además, las hendiduras producidas en la superficie de la pieza son más planas. En consecuencia, el acabado se presenta globalmente más liso y con un menor nivel de contraste. Por lo tanto, si se trata de conseguir una determinada imagen de lijado, se debería elegir una granulometría más gruesa para el cepillo abrasivo con vástago.